Estados Unidos. Decenas de sindicatos y organizaciones sociales salieron a las calles este 1° de mayo. La fecha marcó un nuevo Día del Trabajo con miles de inmigrantes exigiendo respeto, derechos y legalización.
Las protestas más grandes se registraron en Los Ángeles, Nueva York y Chicago. En California, más de 85 colectivos se unieron bajo una sola voz: sin inmigrantes no hay economía.
“Queremos que nuestras familias no sean atacadas ni separadas”, afirmó Jorge Mario, vocero de CHIRLA. La marcha también pidió respeto al debido proceso y a la Constitución.
Laura, trabajadora de un aeropuerto, fue directa: “Sin nosotros, este país no es nada”.
Los manifestantes rechazaron la criminalización, las deportaciones y el discurso de odio. Recordaron que los inmigrantes sostienen con su trabajo sectores clave como agricultura, construcción, servicios y salud.
El periodista Edgar Muñoz, de Telemundo, cubrió la jornada desde Los Ángeles. Su reporte mostró la fuerza de una comunidad decidida a no callar.
